Bogotá Express: ¿Qué hacer en la capital colombiana en 48 horas o menos?

Muchos amigos han estado viajando últimamente a Colombia, cosa que me alegra bastante ya que poco a poco los estigmas y prejuicios que caían sobre ese país se han ido desvaneciendo y el rostro de Colombia en el mundo va cambiando.

Sin embargo, como en muchos lugares aún existen muchos prejuicios sobre las capitales sudamericanas (no todas).

Muchos dicen que en Lima, Bogotá, Santiago, Brasilia o Quito no hay nada que hacer y las ciudades incluso han sido calificadas más de una vez como aburridas y de paso.

Siempre he sido de los que va en contra de los prejuicios y casi siempre se han desmoronado cuando he visitado uno u otro lugar.

En esta entrada te recomiendo algunos lugares y actividades imperdibles que puedes conocer y hacer en la capital cafetera. Ya sea si estás “de paso” hacia la costa caribe de Colombia (Cartagena, Santa Marta o San Andrés) o de visita por unos cortos días.

Museos

Bogotá como casi todas las capitales sudamericanas, es uno de los focos culturales del continente. Existen infinidad de museos, no tantos como en Buenos Aires, Sao Paulo o el DF, pero si existen un par que atraparon mi atención.

Museo de Botero, dedicado íntegramente al trabajo del artista paisa. En el podrás encontrar colecciones fascinantes de las gorditas de Botero.

A título personal, amo el trabajo de este artista colombiano, así que si estás interesado en ver a las gordis, no te pierdas este lugar.

La entrada cuesta 6000 pesos colombianos que al cambio del día de hoy es poco menos de dos dólares americanos, una ganga teniendo en cuenta toda la información valiosa que encontrarás.

Este museo está abierto de Lunes a Domingo, pero no hay atención los días martes. Los domingos y festivos (feriados) la entrada es libre y también hay servicio de guiado.

Museo de Oro, ubicado en plena Plaza Santander, frente a la Estación Museo de Oro de Transmilenio y cerca al Eje Ambiental de Bogotá, este museo ofrece una colección de oro y muestras itinerantes sobre la cultura colombiana. Una colección muy bonita de piezas de joyería encontrada en los más recónditos lugares de Colombia y un imperdible si viajas a la ciudad. Los museos funcionan igual en toda la ciudad y el costo de las entradas es casi el mismo o el mismo en algunos casos. De todas formas, te recomiendo revisar la página de los museos antes de visitarlos y así no darte un chasco de encontrarlos cerrados al llegar.

Tours en bicicleta

La bicicleta es una forma de transporte muy usada en Colombia y es común ver mucha gente usándola en vías principales así como en ciclovías al lado de las principales avenidas. Me parece increíble que un país esté tomando en serio el tema de la contaminación y promueva entre sus ciudadanos el uso de la bici. Colombia es un gran ejemplo de esto e incluso deportivamente ya ha empezado a cosechar triunfos relacionados a la bici. Nairo Quintana y Rigoberto Uran, quedaron en el primer y segundo lugar respectivamente en el Giro de Italia y Mariana Pajon, gana la medalla de oro en BMX en Londres 2012, esto solo entre tantos otros logros que la bicicleta ha traído al país.

Yo usé el servicio de Bogotá Bogotá Bike Tours cuando decidí manejar bicicleta en Bogotá y tengo que decir que el servicio es excepcional. Desde el trato de los guías, hasta las explicaciones durante el recorrido, todas muy buenas.

Hay dos recorridos, los de la mañana que empiezan plan de 11 y los de la tarde a las 2, en promedio duran 4 o 5 horas. Ellos recomiendan tener un estado físico no 100 % óptimo, pero sí que te permita pedalear por bastante tiempo por empinadas calles y obviamente sin temor al tráfico bogotano.

Recuerdo que la primera vez que hice este recorrido pasé por el Mercado de Paloquemaeo, tomamos jugos de fruta y comimos arepas, también fuimos a la zona empresarial de Bogotá, pasando por la carrera séptima completamente peatonalizada, el chorro de Quevedo en la Candelaria y la zona de tolerancia, todo súper interesante, una forma diferente de ver Bogotá.

La segunda vez hice el recorrido de la tarde y pasamos por el estadio El Campín de Bogotá, el Parque Simón Bolívar, la Avenida El Dorado y la Plaza de Bolívar.

Ambos recorridos fueron muy buenos, aunque disfruté más el primero porque hubo muy buena onda con el guía y los compañeros que iban conmigo en el tour.

Bogotá Bike Tours me brindó la bici, el guiado, los cascos y rodilleras, todo el servicio muy bueno por 30000 pesos, pero igual como en los museos, mejor revisar antes de llevarse sorpresas. Búsquenlos en Facebook y les contestarán.

Cerro Monserrate

Subir a través del teleférico al cerro Monserrate es sin duda alguno de los imperdibles en Bogotá. Desde arriba se puede divisar gran parte de la ciudad, así como su inmensidad. Además de tener la vista privilegiada, tendrás el chance de tomar un chocolate caliente, ir a la iglesia en la cima del mirador y obviamente, pasar una tarde o mañana muy bonita. Te recomiendo preguntar antes de subir, sobre todo a los locales, ya que el clima es muy variable en Bogotá y en un abrir y cerrar de ojos puede caer un aguacero terrible y nadie mejor que los locales para recomendarte la mejor hora a subir. Yo lo hice temprano y también en la noche y ambas fueron experiencias increíbles. Tuve una vista privilegiada de la ciudad y la pasé muy bien.

Catedral de Sal de Zipaquirá

Este lugar ha sido considerado una de las maravillas de Colombia y lo es sin duda alguna. Es un lugar muy especial seas o no católico o creyente, ya que para apreciar el arte no necesitas de mayor creencia más que de tus sentidos.

La Catedral de Sal de ubica en el poblado de Zipaquirá, en plena sabana bogotana, una zona muy verde y próspera, un lugar ideal para el retiro. Zipaquirá en si es bastante tranquila, calmada, un típico pueblo bucólico de los Andes, pero atesora en ella su mujer secreto: La Catedral de Sal, que es nada más y nada menos que una mina de sal convertido en un lugar de culto para la religión católica y para el arte. A través de esculturas de sal se han logrado escenificar las 12 estaciones de Cristo, así como la gran cruz al final de las mimas. Un espectáculo impresionante que juega con nuestros sentidos a través de las luces y la sal, todo un imperdible si vas a Bogotá.

No tengo precios exactos respecto a los tickets de ingreso ni el transporte ya que fui invitado de un par de amigos bogotanos. Lo que si les puedo contar es que nos tomamos gran parte del día recorriendo la mina de sal, el pueblo y obviamente comiendo algo. Sé que hay que tomar el Transmilenio hasta el Portal del Norte y luego en ese lugar hay busetas que te llevan hasta el pueblo de Zipaquirá. Hay algunos también que hacen un full day entre Zipaquirá y Guatavita, la laguna sagrada, pero sería cosa de averiguar y que tan conveniente puede ser eso ya que tengo entendido que en Guatavita hay que caminar bastante.

Mi experiencia en Zipaquirá fue bastante grata y sin duda alguna deberías ir si andas con poco tiempo la ciudad. Debes ponerlo en tu listas de cosas que hacer si o si en Bogotá.

Palabras salvadoras y datos salvadores

Como en todo lugar existen palabras muy propias del lugar, pero en Colombia algunas pueden sacarte de cuadro ya que aparentemente tu sabes que significa pero para ellos es otra cosa. Aquí vamos:

Tinto es café, no el vino. Si pides café te darán café con leche. Ten mucho cuidado con ese tema.

Las busetas son bastante baratas y se usan para trayectos relativamente cortos. Para lo demás compra tu tarjeta de Transmilenio y recárgala ya que será tu forma de transporte más útil y segura. Recuerda que en Bogotá no hay metro.

Un vestido es el traje que usan los varones o en palabras peruanas “terno”. No te extrañes si te dicen que bacano el vestido de ese man.

Querido (a), es una palabra tan común que todos la usamos a cada momento, pero querido en Colombia y más en Bogotá significa que eres una buena persona, agradable, afable. Así que si te dicen que eres muy querido no es que te quieren sino que están describiendo una buena cualidad tuya.

Siguiendo con la ropa, un buzo es una chompa o sweater. Buzo en Perú es una prenda deportiva, pero bueno. Cuando me dijeron que bonito tu buzo alguna vez, dije ¿cuál?

Sé que este dato puede sonar a advertencia y tal vez si la sea, pero no recibas nada de nadie por más que te parezca una persona confiable, a menos que sea tu amigo o amiga de años o alguien de tu plena confianza. En mi primer viaje a Colombia, la señorita del counter me preguntó si era responsable y estaba seguro por todo lo que estaba dentro de mi maleta y si había recibido algo de alguien esos días, regalos, dulces o algo así. Lo pensé y al ver mi duda de microsegundos muy solapadamente llamó a un guardia para que revisen mi maleta, un mal rato sin duda alguna, pero que se puede evitar si tienes la plena seguridad de lo que estás llevando. Yo dudé porque había comprado un par de cosas y en ese momento pensé lo peor como cualquiera, pero realmente es bueno revisar todo súper bien ante de empacar y dejar tu maleta, palparla o tomarle una foto creo que ayuda bastante. Uno nunca sabe.

Si viajas a Colombia y tienes unos cuantos días extra, no dudes en disfrutar de Bogotá. Es una ciudad fascinante que te ofrece mil y un cosas por hacer y recuerda que en Colombia el único riesgo es que te quieras quedar, como dice el spot publicitario

20 datos que te pueden ayudar a sobrevivir en la Ciudad de México (DF)

Como algunos de ustedes saben hace poco tuve la fortuna de visitar México y compartí con amigos mexicanos y de otras partes del mundo por casi un mes.

Muchas personas antes de viajar decían que México era muy parecido a Perú y después de haber estado allá llegué a la conclusión que sí y no.

Hay mucha información pero a la vez esa misma desinforma a la gente sobre lo que en si representa el país, es por eso que me animé a dar algunos datos muy personales sobre mi viaje, así como mis impresiones respecto a la capital mexicana: Ciudad de México o el DF.

1. Si bien es cierto hay mucha conectividad con Latinoamérica y las ciudades mexicanas, creo que es recomendable llegar al DF, la capital, y de ahí moverse donde quieras, las distancias pueden ser muy grandes de un punto a otro.
   
   
   
   
2. No pretendas conocer todo el país en un mes. México es un país demasiado grande e incluso tiene distintas zonas horarias así que lo mejor es decidir si quieres visitar el norte, la Riviera Maya (Cancún y demás) o has una combinación del DF con alguno de esos destinos, no cometas el error de querer conocer todo. FOCUS!!!
3. La comida es bastante barata en el DF y existen puestos callejeros de tacos en todas las esquinas de la ciudad o bueno en casi todas. No te sorprendas ver un obrero comiendo al lado de un hombre en traje y corbata el mismo taco, al mismo precio en una esquina del Paseo de La Reforma. Los tacos, tortas y demás se venden en todas partes y son súper económicos.
4. Botana es bocadito, chavos o batos son sinónimos y se usan para referirse a un joven o muchacho, vieja no se refiere a la edad sino a la mujer en general, mande es un sí, qué desea? , ocupa es necesita, camión es autobús, chilangos son los que viven en el DF por mucho tiempo pero no nacieron en la ciudad, antro son discotecas, cahuamas son cervezas grandes, OXXO, 7eleven, Xtra son minimarkets que verás en casi todo el país y más en el DF.
5. En el DF, el metro es la mejor forma de viajar y también la más eficaz y económica, pero como en todas partes existen horas pico en la que es imposible subirse a un tren por lo cual evita subirte a uno muy temprano o entre la tarde y noche.
   
6. Si llegas a subir a un tren muy lleno, se bastante cuidadoso y prudente con tus pertenencias ya que sube y baja mucha gente y en un abrir y cerrar de ojos tus pertenencias pueden desaparecer como si fuera el mejor truco de David Copperfield. Nunca las dejes desatendidas y aunque suene complicado trata de subirte a un tren vacío o medianamente vacío.
7. En la Ciudad de México (el DF), existen doce líneas de metro que tienen una conectividad increíble y es necesario ya que en todo su casco urbano conviven poco más de 20 millones de personas. Existen vagones solo para mujeres que suelen ser los primeros vagones, así que evita subir a ellos si eres hombre, ya que te ganarás un llamado de atención y malas miradas y también te harán bajar en la siguiente estación si logras subir. El último vagón es llamado “la cajita feliz” y pensé que era un mito urbano hasta que lo vi sin saberlo. En los último vagones suelen subirse personas en busca de sexo (generalmente gays o curiosos) así que es común ver gente flirteando o buscando algo. Si es tu nota, no dudes en subirte, sino o quieres evitar pasar un mal rato, EVÍTALO!!!
8. En México y sobretodo en el DF, verás gente vendiendo todo, hasta lo inimaginable, en todas partes. El comercio ambulatorio no está debidamente regulado así que hay gente que trabaja vendiendo desde baterías en el metro subiendo y bajando en cada estación, hasta linternas en el metrobus.
9. No temas si la gente te mira. Pude corroborar en casi todas las ciudades que visité en México, que la gente ama hacer contacto visual, muchas veces llega a ser intimidante, pero es parte de su cultura. Si alguien pasa por la calle y te mira detenidamente no significará que te quiere robar o hacer algo, la gente ama el “eye contact”.
10. Sé que muchos de ustedes han escuchado o leído horrorizados los incidentes de violencia que vive México y a todos se nos viene a la cabeza en algún momento que seremos presa fácil de algún secuestrador o narcotraficante que pedirá una recompensa a cambio de nuestra libertad, pero no hay nada más alejado de la realidad que esa situación. Es cierto que el país vive convulsionado por una serie de sucesos violentos, pero conversando con muchos mexicanos me di cuenta que ellos saben, conocen y afirman que México siempre ha sido así, lamentablemente los episodios violentos no vienen de un año antes sino de mucho tiempo atrás y todo se debe a pugna de poderes, corrupción y un pésimo manejo de la administración estatal. Hay lugares que se deben evitar según las propias autoridades mexicanas, sobre todo los que se encuentran cerca de la frontera con los Estados Unidos. No mencionaré alguno porque no he tenido la buena o mala suerte de visitarlos, pero creo que por más peligroso que digan es un lugar todo se basa en un tema de sentido común y tener dos dedos de frente antes de hacer algo.
    
11. Siguiendo con el tema de la seguridad, muchos dicen que las grandes ciudades suelen ser muy peligrosas, pero al menos en México yo me sentí bastante seguro. El DF siendo una ciudad tan grande está plagada de policías y guardias por todas partes y a toda hora. Sé que hay lugares que se deben evitar como el Tepito o algunas delegaciones peligrosas, pero lo mismo de líneas arriba. El sentido común y confiar en nuestras percepciones te ahorrarán bastantes malos ratos.
    
12. Algo que me sorprendió muchísimo es la cantidad de protestas y manifestaciones que hay en la Ciudad de México, desde la tarde que llegué hasta el día que me fui vi protestas; bastante pacíficas, por todas partes. Que los maestros, que Ayotzinapa, que los médicos. Si bien es cierto una protesta genera caos y tráfico, uno como visitante o viajero tiene que ver siempre el otro lado de las cosas y ponerse a pensar que a pesar de no ser tu país esas personas que están en las calles reclaman algo que consideran justo y válido y a veces no encuentran otra manera de hacer valer sus derechos que saliendo a las calles para que su gobierno y autoridades los escuchen.
    
13. Si tu centro de operaciones en México va ser el DF, te recomiendo buscar un hospedaje cercano al Paseo de la Reforma, una de las arterias principales de la ciudad, sino la más importante junto a Insurgentes. En Paseo de la Reforma encontrarás casi todo lo que necesitas, desde la zona rosa a unos cuantos pasos donde podrás ir de antro, hasta bancos para cambiar tu dinero, centros comerciales, museos, el Bosque de Chapultepec, el Ángel de la Independencia y más. Yo me hospedé en Hostel Suites DF, un hostel muy acogedor, conocí mucha gente, compartí habitación con gente que casi no hablaba español y pude practicar mi inglés, un lugar súper recomendable, a precio bastante asequible y con unos desayunos buenazos incluídos en el precio.
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
14. Si vas a cambiar dinero, trata de hacerlo en un banco. Muchos bancos tienen un súper cambio, pero no permiten que cambies dólares a pesos si no eres cliente del banco. Es cuestión de buscar. Yo pregunté en varios bancos y me quedé en Multiva, tienen un buen cambio, te registran como “cliente” a cero costo, tienen un trato excelente, no hay casi nada de gente y como repito, el cambio muyyy bueno comparado a los otros bancos “famosos” que si te dejan cambiar: Banamex, Scotiabank y BBVA.Por cierto, los bancos en el DF atienden desde las 10 de la mañana hasta las 5 de la tarde en horario corrido de lunes a viernes. Los sábados sólo de 9 a 12 y los domingos no hay atención.
15. Siguiendo con este tema del cambio de moneda, ni mires las casas de cambio a menos que no tengas de otra. El cambio es muy malo, yo tuve la mala suerte de no haber cambiado suficiente dinero el lunes para toda la semana y salía el domingo temprano a Teotihuacán, sólo tenía 80 pesos así que tuve que recurrir a una de las que estaba abierta temprano en Paseo de la Reforma, casi lloro con el mal cambio que me dieron. Lección aprendida, evita usarlas.
16. Los defeños en general son gente muy amable, respetuosa y dispuesta a ayudar. Siempre encontré respuesta a mis preguntas a pesar de muchas veces ser obvias. Las personas a las que saludaba siempre me contestaban el saludo y la atención en general en casi todos los establecimientos públicos y restaurantes es buena y muy buena. No tuve malas experiencias en el tema de la atención, pero eso a veces para muchos puede ser muy subjetivo.
17. El precio de los taxis en el DF es bastante asequible también, sé que muchos viajeros evitan usarlos porque a veces salen del presupuesto, pero otras tantas es más que necesario. Siempre fíjense que el taxista active el taxímetro, la tarifa es de 8 pesos y de noche sube bastante. Si el taxista no activa el taxímetro, háganselo saber y si les dice que no lo hará porque es taxi con tarifa, bájense inmediatamente porque probablemente les cobren el triple del precio real. En general, los taxistas con los que me tope fueron bastante buena onda, muy conversadores y me pedían a gritos que me lleve a Laura Bozzo a Perú hahaha.
    
    
    
    
18. México a diferencia de muchos países de la región, es un país lleno de artistas famosos, todos hemos escuchado alguna vez en nuestras vidas de algún artista mexicano, sea  a través de las telenovelas, música, teatro, cine, etc. Si estás en el DF no te pierdas de ir a un espectáculo de cualquier tipo, son de muchísima calidad, probablemente jamás lo veas en tu país y sobretodo guardarás un recuerdo extra de tu viaje. Como varios amigos saben, yo fui al concierto de OV7 y Kabah, dos grupos pop de fines de los 90 que jamás llegaron a Perú, fue una experiencia increíble y además pude conocer uno de los escenarios más afamados de la escena artística en toda América: El Auditorio Nacional de la Ciudad de México. Sin duda alguna ir a un espectáculo es un plus que hará tu viaje mucho más memorable.
    
    
    
    
19. Los museos son increíbles, mejor dicho MARAVILLOSOS!!! El Museo Nacional de Antropología es uno de los mejores museos que he visto en mi vida , si no es el mejor. La cantidad de cosas para ver es inacabable. La entrada cuesta 60 pesos ( 4 dólares al cambio) y bien vale la pena. Es un museo que sintetiza lo que vas a ver en México, las culturas y civilizaciones que se desarrollaron en ese territorio, sencillamente espectacular. La Casa Azul de Frida Kahlo y Diego Rivera, también es un lugar hermoso, si conoces algo del trabajo de estos dos artistas mexicanos o algunos pasajes de su vida, es necesario que vayas a la Casa Azul. El precio de la entrada es casi 200 pesos cosa que me parece bastante exagerada, pero entiendo que es un museo privado y no recibe apoyo del estado.El Castillo de Chapultepec con una entrada de 60 pesos también es un lugar que debes visitar, otrora residencia de los reyes de México Maximiliano y Carlotta, guarda vestigios de la ciudad y tiene una vista envidiable de la misma; así como testimonios materiales del México de principios de siglo, hermosos murales, decoración neoclásica y afrancesada, un lugar digno de muchas fotos y una mañana.
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
    
20. Finalmente, 20 cosas me quedaron chicas. La Ciudad de México me conmovió de principio a fin, siento que conocí tanto de ella, pero a la vez tan poco. Siento que es un lugar de esos a los que amas u odias, con problemas y cosas hermosas como todo el país. Una ciudad que puede llegar a ser un monstruo, pero uno que se deja dominar, un monstruo que no es indomable pero que a veces te hace patalear. Yo creo que Lima se parece mucho a la Ciudad de México, tal vez eso hizo que pase mucho más tiempo en ella que en cualquier otro lugar de México, amé el hecho de tener algo tan mío (mi Lima) tan lejos de casa. Me sentí un chilango más andando por las calles del DF y hasta terminé instruyendo a locales sobre cómo llegar a cierto punto de su ciudad. Es increíble lo que un viaje, una ciudad, puede hacer por uno. Amé al DF a pesar que muchos lo eviten y piensen que México es solo Cancún y el All inclusive. Espero regresar pronto a la “chilanguería”, como llamaba al DF, poder redescubrirla y seguir amándola como lo hice ese mes.

¿Quién soy y qué es Palabra de Viajero?

Hola,

Soy Wilfredo, Wil o Willy para los amigos (no me gusta el segundo nick). Nací en Lima hace 32 años y siempre he vivido aquí.

Desde muy niño tuve la curiosidad de querer conocer lo que había más allá del lugar donde vivía pero por alguna razón no salí de Lima hasta los 11 años.

Mi primer viaje fue al Cusco por 1995, también fue la primera vez que me subí a un avión y viajé con mis tías por casi un mes. Desde entonces el viajar y el conocer fue como esa comida que te dan y siempre la quieres repetir porque te gusta mucho, en eso se volvió el viajar en mi vida.

Por distintas razones, temas económicos, de estudios, etc. ,  no volví a viajar hasta mi viaje de promoción en 1999 cuando nuevamente regresamos a Cusco y también estuvimos por Arequipa, fue un viaje muy bonito pero no lo disfruté del todo porque descubrí en esa oportunidad que no me gustaba viajar con otras personas.

Después de ese viajé ingresé a la universidad, estudié derecho y por razones de la vida o del destino terminé enseñando idiomas y a eso me dedico en la actualidad. Me gusta lo que hago, así como salir a comer con mis amigos o ir hacer window shopping (y a veces comprar) ,pero lo que más me apasiona en la vida y ocupa muchas veces gran parte de mi tiempo es viajar y cuando digo viajar hablo no solo del hecho de subirse a un avión y llegar al lugar deseado a tomarse fotos para luego regresar a tu vida rutinaria, sino más bien de todo lo que conlleva llegar a ese resultado final: la planificación , la búsqueda de cosas que se acomoden a lo que quieres en tu viaje, eso es lo que realmente me apasiona y obviamente , conocer nuevos lugares.

Gracias a esas ganas de querer conocer me di la oportunidad de visitar muchos departamentos de mi Perucito ( Cusco, Arequipa, Puno, La Libertad, Lambayeque, Ancash, Piura, Tumbes, Tacna, Moquegua, Ica, Loreto, Ayacucho), así como 9 países de mi continente ( Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Uruguay, Estados Unidos y recientemente México).

Soy de los que creen que nada es imposible y que las barreras se las pone uno mismo y eso nos impide ir más allá de la ciudad en que vivimos a la que muchas veces ni siquiera descubrimos completamente.

Suelo dar consejos de viajes a mis amigos desde mi cortísima experiencia en esto y he decidido iniciar “Palabra de Viajero”, mi bebé, que espero crezca y se haga fuerte con la ayuda de todos ustedes, amigos viajeros de la vida y de espíritu.

En esto blog narraré mis experiencias, colgaré fotos y obviamente compartiré lo poco o mucho que he aprendido y sigo aprendiendo viajando y por qué no, sin ánimos de pecar de ególatra, inspirar a los que me lean para viajar y conocer todo lo que este mundo nos ofrece.

Sé que aún existen muchos estigmas respecto al tema de los viajes, los financiamientos, cómo lo haces, etc. etc. etc. Incluso alguna vez un grupo de amigos me confesó que ellos juraban que yo vivía con 100 soles al mes (poco más de 30 dólares) por los viajes que hacía, pero no.

Aquí compartiré como le hago para viajar, cómo vivo cuando viajo y qué suelo hacer para lograr que mi viaje sea memorable e inolvidable en mi vida.

Gracias por leerme gente y espero que les guste el contenido del blog. 

Acepto sugerencias, comentarios, mensajes, mandadas a la M#$5” y demás, pero siempre con el debido respeto hahaha #PalabradeViajero